Alfonso Rivera.- Este 19 de diciembre se cumplen trece años de que Pachuca ganó su primer título en la Primera División en aquel mágico Invierno 1999.
Esa campaña era la tercera de Pachuca luego de su regreso al máximo circuito y, bajo el mando de Javier Aguirre, realizaron una temporada regular buena con destacadas victorias como al Cruz Azul y al América de visita, o los empates con Atlas y Toluca, quienes eran los líderes de la competencia.
Luego de 17 fechas disputadas los Tuzos obtuvieron 26 puntos, colocándose en el tercer lugar de su grupo, por lo que en la tabla general quedó ubicado en la séptima posición, teniendo la oportunidad de disputar el repechaje contra el Morelia.
Ante los michoacanos, Pachuca sufrió en el partido de ida al caer 4-2. Pero en la vuelta en el estadio Hidalgo levantaron la cabeza. Gabriel Caballero hizo un tanto al minuto ocho, por lo que los Tuzos necesitaban un gol más para avanzar por mejor posición en la tabla. Corrían los minutos y no caía el tan ansiado gol, pero al minuto 90 llegaría una jugada que lo cambió todo.
En un tiro de esquina ejecutado por Cesáreo Victorino, Marcelino Bernal conectó con la cabeza para anotar el tanto que ponía a los hidalguenses en cuartos de final, donde se encontrarían al sublíder del torneo: el Toluca.
Los Diablos parecían un equipo invencible, que desplegaba un gran futbol. En el juego de ida en el Hidalgo Marcelino Bernal anotó el único tanto del encuentro y con el que Pachuca se iba con ventaja.
Todos creían que los dirigidos por Aguirre no saldrían vivos del infierno, pero ellos opinaban otra cosa. El partido en La Bombonera fue difícil, pero la defensiva blanquiazul supo aguantar bien y Pablo Hernán Gómez con su habilidad puso los dos tantos tuzos para que el partido quedara 2-2, global 3-2 que daba el pase a los de Hidalgo.
Sin que nadie lo apostara los Tuzos estaban en semifinales, donde enfrentarían al super líder: Atlas. Esos Rojinegros son recordados por el buen futbol que jugaban y eran marcados como claros favoritos.
Otra vez Pablo Hernán Gómez se convertiría en el hombre importante de Pachuca, anotando otros dos goles en la liguilla para darle la ventaja a los Tuzos 2-0 en el juego de ida. Lavolpe y sus rojinegros no se la creían.
En la vuelta los de Jalisco solo pudieron vencer una vez al portero Ignacio González y así Pachuca estaba logrando su histórico pase a la gran final del futbol mexicano, la cual disputarían ante uno de los llamados grandes de México: Cruz Azul.
Jueves 16 de diciembre en el Hidalgo se jugaba la ida de la gran final en un estadio lleno, con gran colorido y una ciudad vuelta loca por su equipo. Cruz Azul abrió el marcador al 20’ con gol de Julio Pinheiro, pero enseguida los Tuzos respondieron con una buena combinación entre Pablo Hernán, Caballero y Alejandro Glaría para que éste anotara el empate.
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