Pachuca, Hidalgo, Sabado 11 de Febrero de 2012
Segui @RicardoCarino
RICARDO CARIÑO
Si algo tiene el Pachuca de este Clausura 2012 es la capacidad de reacción cuando se encuentra por debajo del marcador. El equipo de Efraín Flores empieza a tener forma y a ser consistente, pues el torneo pasado tenía la intención de jugar bien, pero se quedó en intento de jugar a algo.
El equipo tiene el control del balón, por momentos es ofensivo pero aún se ve lejos de desplegar el futbol del Pachuca de Christian «Chaco» Giménez, Damián Álvarez, Aquivaldo, Correa y compañía. Pero como Roma no se construyó en un día, estoy seguro que estos tuzos podrán crecer en juego, llegadas a la portería rival y contundencia.
Tal vez la mayor sorpresa para la afición se llama Enrique Esqueda, pues el ex águila demostró que tiene ganas y el torneo pasado lo demostró con buenas actuaciones y lo más importante con goles, y así obtener la confianza de la afición y del técnico.
La única falla que tiene y ha costado mucho sigue siendo la defensa. Desde el retiro de Miguel Calero, la parte baja carece de un líder que ordene y genere confianza a todo el conjunto. El jugador más débil del equipo es Muñoz Mustafá, es el que más sufre en las coberturas y el marcaje, los errores del argentino han costado goles en contra y muchos se cuestionan si es un jugador indicado para el equipo.
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